cacharreo escribió: ↑15 May 2024, 19:36Y si está relativamente lleno, más lento aún porque la eficiencia disminuye con la capacidad ocupada. Aunque como lo normal es comprobarlo en dispositivos recién comprados, mejor con --destructive.
Aún así, yo solo recomendaría usar --destructive sólo si después vas a formatear la tarjeta.
cacharreo escribió: ↑15 May 2024, 19:36En efecto, modifican la controladora de la memoria cambiándole varios ajustes que, según la sofisticación de la falsificación van desde un área con un número de sectores falso (
limbo) a una secuencia de áreas
limbo y
wraparound.
f3probe cuando detecta un dispositivo con una capacidad diferente a la anunciada, ofrece la línea de comandos necesaria para corregirla. A partir de ahí se pueden crear las particiones, formatearlas y usar el dispositivo en el ordenador.
Hay dos grandes diferencias:
- Lo más básico es que puedes formatear a bajo nivel la flash. Si hay bloques "tocados", este formateo evitará que la controladora los utilice para almacenamiento (NOTA: si hay demasiados, el pendrive queda inutilizable).
- Lo segundo es que igualas la capacidad reportada con la capacidad real. Es decir, el pendrive informará (por ejemplo) que es de 8 gigas y el ordenador cuando intente formatearlo lo hará a 8 gigas. Si "arreglas" el pendrive a base de particionar a su capacidad real, la capacidad "falsa" seguirá visible... por lo que al formatearlo con Rufus (por ejemplo), se volverá a crear una partición que incluya el espacio "fake" y la volverás a tener liada.
(En un caso con un pendrive Emtec de 32 gigas "tocado" lo truqué para que formateara a 10 gigas y así poder utilizarlo como un linux arrancable... supuestamente debería haber utilizado los 10 gigas mejores de la flash y aún así no me fiaría para transportar datos en él)
¿Qué es mejor? Bueno, el tema de usar la herramienta adecuada para tu pendrive es leeeeeeento (¡y solo he visto estos programas para pendrives!), pero te ofrece a cambio un pendrive más fiable y que puedes manipular sin tener que recordar su capacidad real. Arreglarlo a golpe de particionado es mucho más rápido, pero ofrece menos garantías y siempre tienes que recordar que no debes borrarlo completamente. Además, también podrías hacerlo con tarjetas SD y CF.
Siguiendo con estos pensamientos, últimamente he visto algunos SSDs de dudosa procedencia que fallan más que una escopeta de feria. Me gustaría pasarles un programa de este tipo para verificar su capacidad, pero creo que sí es real y que el problema es la calidad de la flash. Las cosas que he notado (en diferentes discos de la misma marca/modelo):
- La duración del test corto y largo de SMART es la misma (2 minutos), lo que sugiere que el test largo no es tan exhaustivo como debería (¿firmware "optimista"?).
- Uno de los discos "dudosos" se tiró haciendo cada test más de 20 minutos... y los dió como buenos (no me lo trago).
- En otro, el test se ejecutaba hasta el 50%... y después saltaba otra vez hasta el 10% (no pude terminar de testearlo).
Obviamente, hay algo "extraño" en estos discos... estoy seguro que en estos el timo no tiene que ver con la capacidad sino con la calidad.
También estoy seguro que en alguna parte existen herramientas análogas a las de los pendrive para hablar con las contraladoras de los SSD, pero todavía no las he encontrado.
I have traveled across the universe and through the years to find Her. Sometimes going all the way is just a start.